El proyecto ejecutado el 2013 por el Rector Marcelo Hoyos donde se doto de computadoras portátiles, datas, tables, fotocopiadoras, etc., por un valor superior de 3 millones de bolivianos, todo esto desapareció de manera sorpresiva.
Sorprende que en las oficinas de la FUL en el campus del tejar se encontraba una cantidad importante de estos objetos que deberían estar al servicio de los estudiantes, de manera repentina esta oficina cerro sus puertas y no volvió a abrirse mas.
Ante esta situación mas que irregular alarma a los estudiantes quienes solicitaran formalmente al ministerio de Transparencia y Lucha contra la Corrupción inicie una investigación de oficio.
Paolo Martinez realizara las gestiones a un mes de finalizar la gestión de la actual Federación, la idea es que estos dirigentes no se vayan de manera impute y de una vez se siente un precedente.
Esperan que esta vez si haya justicia y sanciones.